La magnitud del problema

El alcohol y su uso excesivo son la causa de una amplia variedad de enfermedades y daños. El abordaje de la gran cantidad de daños individuales y sociales debidos al trastorno por uso de alcohol (TUA) y al uso excesivo de alcohol es una prioridad de salud pública. Esto es especialmente relevante en América Latina donde el alcohol se sitúa en la cuarta posición de los principales factores de riesgo de morbilidad y muerte prematura.
El TUA presenta una elevada comorbilidad con otros trastornos mentales, y más del 40% de los pacientes diagnosticados con TUA en Atención Primaria padecen depresión que, a su vez, es el trastorno mental más frecuente.

La pandemia de COVID-19 en 2020 tiene varios impactos en SCALA: Es normal y comprensible que la gente experimente un aumento de sentimientos de miedo, preocupación y estrés en el contexto de incertidumbre de la pandemia de COVID-19. Aunque todavía no hay evidencia robusta, esto podría hacer que algunas personas adopten estrategias de afrontamiento nocivas, como incrementar el consumo de alcohol o patrones de consumo dañinos (p. ej., Consumo excesivo de alcohol, beber en exceso alrededor de menores, violencia asociada con la bebida). El servicio de salud se ve afectado por las consecuencias del virus para la salud; dejando a los profesionales menos tiempo para dedicarlo a otras cuestiones, como la capacitación y la detección del consumo nocivo de alcohol. Los profesionales también están sometidos a estrés y pueden tener dificultades para aplicar nuevos métodos. El calendario y el formato del estudio SCALA han tenido que adaptarse para solucionar estos problemas y el necesario cambio a la telemedicina que ha provocado el COVID-19.

Implementación escalonada de la solución

Aunque los programas de prevención y manejo del uso excesivo de alcohol en el contexto de Atención Primaria (AP) han demostrado ser clínicamente eficaces y coste-efectivos, el nivel de adopción e implementación de estos programas en la práctica clínica habitual sigue siendo bajo, por lo que los beneficios de salud pública son modestos y a corto plazo. Algunos estudios de la OMS han sugerido que esta situación se podría mejorar si las actividades de la AP estuvieran integradas en un apoyo comunitario y municipal más amplio, así como mediante la formación de los proveedores de salud individuales.

SCALA tiene la intención de evaluar y basarse en esta hipótesis en América Latina, mediante un estudio cuasi-experimental que compara la implementación escalonada de un programa de cribado e intervención breve personalizado en el contexto de AP, integrado en un plan de acción municipal de apoyo continuo, con la práctica clínica habitual.

Objetivos del proyecto SCALA:

• Paquetes de intervención personalizados para mejorar la prevención, detección precoz y consejo para el uso excesivo de alcohol y depresión co-mórbida en Colombia, México y Perú.
• Implementar y evaluar si la implementación escalonada integrada de los paquetes personalizados mejora la generalización del cribado y de la intervención breve en municipios urbanos de países de ingresos medios.
• Identificar barreras y facilitadores a la implementación escalonada y documentar los requisitos de recursos para un análisis económico.
• Producir un marco y una estrategia de implementación escalonada validados, teniendo en cuenta el estigma y la igualdad, con el fin de mejorar la reproducción de los paquetes SCALA personalizados alrededor del mundo.

Proceso y cronología del proyecto

El proceso de SCALA está basado en el marco de 4 fases para implementar de forma escalonada del Institute of Health Improvement (IHI) de los Estados Unidos. Los pasos de este marco han sido adaptados para adecuarlos al área de prevención de problemas por uso de alcohol y depresión co-mórbida y al contexto de atención primaria en América Latina.